viernes, 30 de julio de 2010

LA BIBLIOTECA DEL COLEGIO MAYOR PEÑAFIEL CRECE...

"El archivero de la Lubianka" de Travis Holland

Moscú 1939. Pável Dubrov trabaja en los archivos de la Lubianka, el cuartel general y prisión de la policía política de Stalin. Su labor cotidiana consiste en clasificar las obras de los escritores perseguidos, y allí encarcelados, para posteriormente destruirlas. Antiguo profesor de literatura obligado a dejar la docencia, apesadumbrado por la pérdida de su esposa, su vida aletargada transita sin la menor emoción ni esperanza, entre el tedio y la triste nostalgia, pero también con la inseguridad y el temor a caer otra vez en desgracia. Todo va a cambiar el día que debe interrogar a un prisionero para determinar la autoría de un relato inacabado. El preso es el escritor Isaak Bábel. Sus manuscritos, como es habitual, le son entregados a Pável Dubrov con la orden de destruirlos. Pero aquel contacto con el autor de Caballería Roja se ha convertido en una catarsis para el archivero de la Lubianka que va a dar nuevamente sentido a su vida. Tendrá que tomar una decisión arriesgada, frente a un aparato burocrático perverso y represivo. Él solo, en un mundo que se desploma a su alrededor, entre las irracionales depuraciones del régimen comunista y una Segunda Guerra Mundial que se asoma en el horizonte helado soviético.

El archivero de la Lubianka es una emocionante novela de intriga que, a través de una galería de personajes variopintos, algunos reales, otros ficticios, refleja la desesperanza y la impotencia vivida durante el régimen de terror de Stalin. Travis Holland, desde los márgenes de la historia, con una prosa bella y precisa, construye una trama vigorosa y seductora sobre el valor y los caminos insospechados que conducen al ser humano a sobreponerse a las adversidades y la opresión, aunque ello conlleve poner en peligro su propia vida. Una novela, en suma, que es un homenaje al mundo de las letras, al poder de redención de la literatura.

Fdo.: la biblioteca del Colegio Mayor Peñafiel de Valladolid

1 comentario:

Anónimo dijo...

Típico libro para leer debajo de una sombrilla mirando al mar...